En él, la naturaleza espontánea y libre encuentra un equilibrio sinérgico con el orden de las plantaciones agrícolas, creando un entorno urbano que combina la infraestructura con la esencia del jardín mediterráneo.
Los bancales rectilíneos originales, hechos a base de muros de piedra seca y el sudor de generaciones, han crecido y enraizado libremente siguiendo el trazado de las curvas de nivel, convirtiendo todo el espacio en una sucesión de terrazas ascendentes, conectadas por infinitos recorridos en los que perderse y encontrarse. Las terrazas están separadas entre sí por un metro que permite que la conexión entre ellas sea fácil —siendo todo el parque accesible para minusválidos— pero que a la vez permite desarrollar distintos escenarios en cada plataforma.
La edificación de la propuesta es la mínima, subrayando el espíritu de sostenibilidad de toda la propuesta de jardín mediterráneo y paisajismo urbano. El parque carece de pavimentación en su totalidad (excepto la terraza más alta donde se pavimenta para la recogida de agua de lluvia) y su mayor construcción son los muros de gaviones que separan las terrazas, así como las rampas y escaleras que conectan todos los bancales. Estos muros conservan en la medida de lo posible aquellos existentes y reutilizan la piedra del lugar. Para que la funcionalidad del parque sea óptima, hemos añadido unos pequeños pabellones que albergan aseos, información, almacén de herramientas en los huertos, áreas de mantenimiento y cafeterías, lo que contribuye a la infraestructura urbana del entorno.
La estructura estratificada del parque se acentúa por el colorido único de las buganvillas, usando una tonalidad distinta de flor en cada terraza y la plantación de especies dominantes diferenciadas para cada bancal, lo que convierte cada horizonte en una experiencia sensorial diferente. Recorriendo el parque se van sembrando recuerdos felices entre higueras, olivos, almendros, pinos, algarrobos y acebuches; hasta que llegamos al mar, el último horizonte.
Horizontes es un proyecto de paisajismo mediterráneo y arquitectura urbana abierto a la espontaneidad y el cambio; muchas especies se reproducirán libremente y esto cambiará el diseño original, haciendo que el lugar tenga vida propia y se convierta en una parte esencial de la infraestructura y el jardín urbano de la zona.